La casa
– Casa rural Arribes del Duero –
Casa Baltasara se asienta sobre la base de una antigua vivienda de labradores construida en piedra y madera. La orografía del terreno hace que su construcción fuese peculiar estando la planta baja situada por debajo del nivel de la calle y consiguiendo de esta manera mantener una temperatura constante durante todo el año.
Con la reforma se han levantado una primera planta y sobre esta dos altillos que conforman su peculiar diseño interior empleando la piedra y parte de la madera de la construcción original.
El exterior de la casa
Esta casa rural en los Arribes del Duero está orientada al norte donde asoman las dos ventanas del salón/cocina de la primera planta y las dos ventadas de la habitación de la planta inferior.
Las paredes de piedra son gruesas, el tejado es de madera y tejas, todo ello muy bien aislado, lo que permite mantener una temperatura estable durante todo el año especialmente en la planta inferior.
Hay una zona de aparcamiento a escasos 15 metros de la casa donde podemos dejar los vehículos aunque en Pinilla de Fermoselle el espacio para aparcar nunca ha sido tema de conversación. Estamos hablando de un pueblo con alrededor de 55 vecinos censados.
El interior de la casa
Casa Baltasara, una casa rural en los Arribes del Duero, se divide en dos plantas y un doble altillo. En la planta inferior, por debajo del nivel de la calle, nos encontramos con un gran salón con chimenea y TV, una habitación doble, un cuarto de baño completo y varias estancias para almacenaje. Esta planta es sin duda la más apreciada en los meses estivales. Además, en el salón, podréis practicar el juego de los dardos, al que tan aficionados somos en la familia.
En la primera planta, ya por encima del nivel de la calle, están situadas la enorme cocina-salón, una amplia habitación de matrimonio y un cuarto de baño completo.
Por último, y basándonos en el diseño de las antiguas viviendas con sus sobrados, creamos dos altillos que alojan una habitación cada uno. Uno lo situamos encima de la cocina-salón y un segundo altillo encima de la habitación de la primera planta. Esto conforma un diseño de la vivienda nada convencional y alejado de los diseños de los pisos de las ciudades, algo que siempre es apreciado por los visitantes.