El fuego se originó en la zona de La Ribera, entre Pinilla de Fermoselle y Fermoselle. Un ganadero de la zona avistó el fuego y llamó al servicio de emergencias del 112.
En las tareas de control extinción intervinieron ayer, según informa la Junta de Castilla y León, tres helicópteros, un avión de carga en tierra, dos cuadrillas de especialistas en la lucha contra incendios forestales, dos autobombas, dos cuadrillas de tierra y también afectivos del parque de Bomberos de la Diputación provincial de Zamora y agentes de la Guardia Civil.
El agua era recogida en el embalse de Almendra, aunque la fuente de agua más cercana es el propio rio Duero, a tan solo 3 o 4 km. Pero suponemos que el dificil acceso al rio y la profundidad del mismo hacen más facil y eficaz desplazarse hasta la presa de Almendra, en el término de Cibanal.
Sin embargo, era evidente y notable en la tarde de ayer el malestar de buena parte de los presentes por la tardanza en intervenir los medios áreos, especialmente de quienes se veían perjudicados por los efectos de las llamas y que seguían de cerca la expansión del fuego. El calificativo de "vergüenza" era algo común en algunos grupos presentes en la zona, y que reparaban en las excelenes calificaciones de conservación que cuenta el territorio donde las llamas desfilaban, durante un tiempo, con una virulencia que asustaba. El incendio de Arribes del Duero llega en un momento en que el operativo está listo para luchar contra las llamas y viene a evidenciar la preocupación existente entra los ciudadanos y las propias instituciones por la abundancia de vegetación que presentan los campos debido a las abundantes lluvias habidas a lo largo del año.
Todavía no se ha publicado el dato oficial de la superficie quemada pero según los vecinos la cifra podría ascender a unas setenta hectáreas las abrasadas.